viernes 3 de septiembre de 2010
Francia levanta el velo de sus archivos de la ocupación nazi
Francia se apresta a digitalizar y poner en línea miles de documentos de la Segunda Guerra Mundial, lo que permitirá a cualquiera con acceso a internet indagar quién colaboró con los nazis en esa época oscura del país.
La publicación en la red simplificará el trámite, abriendo el camino para que cualquiera entre a ese universo y se entere, con sólo presionar unas teclas, si algún pariente, vecino o conocido está nombrado en los documentos.
Los expertos opinan que la operación es parte de un proceso reciente de la sociedad francesa para dejar de lado los mitos y engaños sobre la ocupación y la resistencia, y asumir los hechos de la época tal como fueron.
Pero también advierten sobre el riesgo de que el acceso abierto a los archivos lleve a algunos a sacar conclusiones erróneas sobre quiénes delataron a gente o aportaron información comprometedora a la policía.
La digitalización abarcará diversos archivos policiales de París, desde informes generales hasta seguimiento de individuos, transcripciones de interrogatorios o cartas de delación de judíos, comunistas o resistentes.
«Son documentos de una importancia crucial», dijo Denis Peschanski, historiador y director de investigaciones en el Centro Nacional de Investigación Científica (CNRS por sus siglas en francés).
«Muestran, sobre todo, el carácter muy profesional de la policía de París y el papel de la policía francesa durante su colaboración con los ocupantes», indicó Peschanski a BBC Mundo.
Del sótano a la red
Los archivos han sido guardados durante décadas en el subsuelo a del Museo de la Prefectura de Policía, en pleno de París, y hasta ahora el acceso a ellos es restringido.
Mientras muchos documentos sensibles fueron destruidos tras la liberación de Francia, otros miles fueron guardados en cajas y clasificados durante 75 años por una decisión del gobierno de la posguerra.
Ese período comenzará a caducar en 2015 para los documentos fechados en 1940 y en los años siguientes para el resto del material.
Aunque hace algunos años se permitió el acceso al material, se establecieron condiciones como pedidos de autorización y justificaciones previas que hicieron complejo el trámite para gente común.
No obstante, algunos investigadores e historiadores como Peschanski han podido bucear en las cajas para tareas específicas, como libros o documentales.
Fuente | BBC Mundo